En procura de estar al tanto de las mejores prácticas a nivel internacional

La CESS se reunió con la Agencia Sueca de Pensiones para conocer de primera mano la experiencia de un país líder en la materia

30 de Noviembre de 2020



La Comisión de Expertos en Seguridad Social (CESS), junto a los equipos técnicos y académicos que la apoyan, se reunieron el viernes 27 con la Agencia Sueca de Pensiones en un webinar coorganizado con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Esta actividad se enmarca en uno de los fundamentos de la CESS: conocer de primera mano qué hacen los países líderes en materia previsional.

El webinar contó con exposiciones de representantes del BID y de la Agencia Sueca de Pensiones, como la de su director general, Daniel Barr, y las de otros destacados especialistas del país nórdico.

“Suecia y su modelo de pensiones es siempre un referente y especialmente para nosotros en Uruguay, en la medida en que hay algunos aspectos de diseño que, más allá de las diferencias, tienen similitudes”, señaló durante el intercambio el presidente de la CESS, Rodolfo Saldain.

Barr contó que debido a la pandemia en los últimos meses se han pospuesto la mayoría de los eventos sobre sistemas previsionales y, en ese sentido, resaltó la concreción del encuentro virtual con la CESS, poniéndose a disposición para apoyar a la comisión de cara al “trabajo muy importante” que enfrentará al elaborar la propuesta de reforma del sistema de seguridad social uruguayo.

Al igual que Uruguay, Suecia incorporó en la década de los 90 un pilar de ahorro individual y mantuvo un esquema de reparto intergeneracional de carácter contributivo, así como uno no contributivo financiado con fondos fiscales. 

Las variantes de reparto y ahorro individual obligatorio conforman el sistema de Pensiones Públicas, que es de carácter general. A los cotizantes se les descuenta el 18,5% de sus sueldos: un 16% se destina al esquema de reparto (cuentas nocionales) y para el 2,5% restante los trabajadores deben elegir alguna alternativa de inversión entre 488 fondos, bajo modalidad de capitalización individual. Pueden elegir hasta 5 fondos, y si no lo hacen, se les asigna por defecto el que es gestionado por una agencia pública. Todos los trabajadores tienen el derecho de cambiar de fondo, conforme a sus preferencias. 

Además, el sistema previsional sueco cuenta con otros dos pilares. Uno es conocido como de Pensiones Ocupacionales, que abarca a casi el 90% de los cotizantes y recibe fondos aportados a partir de instancias de negociación colectiva entre trabajadores y empleadores. El restante brinda opciones de ahorro voluntario en compañías de seguro o fondos de inversión.

Por otro lado, Suecia ha implementado en los últimos años mecanismos automáticos y semiautomáticos para ajustar la edad de retiro y la tasa de reemplazo (que surge de la relación entre el ingreso durante el retiro y el de la etapa de actividad), considerando la evolución de factores como la expectativa de vida al momento de la jubilación y el salario promedio. Además, el ajuste de las jubilaciones toma en cuenta la evolución de los salarios y las finanzas del sistema. A juicio de los expositores de la agencia sueca de pensiones, estos mecanismos de ajuste automáticos han contribuido a la sostenibilidad del sistema. 

En la conferencia virtual, el especialista principal en la División de Mercados Laborales del BID, Mariano Bosch, destacó el carácter “innovador” del modelo sueco de pensiones, valorando especialmente cómo se combinan los pilares de reparto y ahorro, y la incorporación de mecanismos de ajustes de las variables fundamentales del sistema.

Asimismo, Bosch afirmó que la reforma de los sistemas previsionales es unos de los retos de política pública “más grandes” que enfrentan todos los países, y en particular los de América Latina y el Caribe, por el “rápido” proceso de envejecimiento poblacional que se registrará en las próximas décadas.